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En la costa sur de Tasmania, en la zona más baja de Oceanía, se encuentra una de las olas más desafiantes para los surfistas, incluso para los mejores del mundo. En este caso, uno de ellos lo sufrió en primera persona y desapareció en medio de una gigantesca ola. «Me sorprende que todavía esté vivo», manifestó Mikey Brennan luego de padecer la temible Shipstern Bluff. El surfista de 38 años sufrió contusiones en las costillas y una conmoción cerebral leve.
De todas maneras, Brennan sabía que se enfrentaba ante un peligro enorme, debido a que esta ola es considerada una de las más difíciles y arriesgadas. Luego de ser engullido por el tremendo oleaje que se produjo y estar desaparecido varios segundos debajo del agua, pudo salir a flote y fue rescatado por los servicios de emergencias que le salvaron la vida.
En cuanto a la ola que no pudo sobrepasar y le causó un momento terrorífico que lo dejó un pésimo recuerdo en el que estuvo cerca de la muerte, el surfista expresó: «Recuerdo la ola, cuando entré en ella y luego di un gran paso, como uno de esos momentos monumentales. Pero después simplemente caí muy fuerte. No pude controlarlo para aterrizar bien».
Sin embargo, el deportista experimentado en la materia no recuerda lo sucedido. Al momento del rescate se lo notaba claramente confundido y muy mareado por la cantidad de vueltas que había dado bajo el agua. Luego fue socorrido y lo sacaron en una moto de agua para ser finalmente trasladado a un hospital Royal Hobart, donde le realizaron los estudios que arrojaron las lesiones comunicadas.
Una vez controlado y fuera de peligro, sobre lo sucedido confesó: «En ese momento estaba recobrando la conciencia y les pregunté a los chicos quiénes eran. No sabía quién era nadie». Luego, sobre el protocolo contó: «Tenemos motos acuáticas y todo el equipo de seguridad, como la tabla espinal y nuestros propios dispositivos de flotación, para estar lo más preparados posible».
Shipstern Bluff en la costa sur de Tasmania.La mítica y temerosa ola Shipstern Bluff no es para cualquiera. Es tan famosa como compleja por las especiales características del arrecife en el que rompe. También puede alcanzar con mucha facilidad los 70 kilómetros por hora cuando llega a la zona que aumenta considerablemente de tamaño, por lo que un mínimo fallo en la técnica puede generar una catástrofe.
El veterano surfista es experto en este tipo de olas, pero no es la primera vez que sufre una grave lesión. Al igual que en esta ocasión, hace algunos años también sufrió un fuerte golpe que lo alejó del agua por mucho tiempo. En 2010, también en Tasmania pero al este del estado insular, mientras surfeada en Governor Island, Brennan se fracturó la espalda.
Esta vez, el hombre especialista en surf comparó ambas situaciones pero dejó en claro que esta ocasión fue mucho peor. «Para ser honesto, la caída de Shipstern fue lo más cercano a la muerte que estuve porque incluso cuando me rompí la espalda en la costa este en Governor’s Park estuve consciente todo el tiempo. Fue igual de peligroso, pero esto fue como quedar inconsciente. Realmente no puedo explicarlo».
La tremenda ola de Shipstern Bluff en Tasmania.A pesar de los accidentes que pasó y este último que fue el peor de todos, Brennan se niega a dejar su pasión por la tabla y las olas. «Me encanta el océano. Estaba presionando, sabía que estaba yendo en contra de mi miedo y supongo que tienes que estar dispuesto a ir a ese lugar. Y eso fue lo que hice. Me siento bendecido y realmente agradecido por la vida y ansioso por pasar tiempo con todos», comentó.